El metacrilato a medida puede ser una de las claves del éxito de tu negocio si sabes encajarlo a la perfección con el entorno donde se presenta.
En A. Dumont-Fredo trabajamos para diseñar y fabricar los proyectos que nos encargan los clientes para hacer realidad sus sueños. En el post de hoy te vamos a contar el origen de este preciado material.
El primer plástico se crea tras un concurso realizado en 1860 en Estados Unidos, al ofrecer un premio en metálico a quien produjera un sustituto del marfil para fabricar bolas de billar, ya que sus reservas se estaban agotando. El ganador fue John Hyatt, que inventó un tipo de plástico al que llamó celuloide.
Fue muchos años después, en la década de los 30 cuando descubrieron el polietileno (PE), el poliestireno (PS), el nylon y el polimetacrilato de metilo (PMMA). Veinte años más tarde, en los años 50 aparece el polipropileno (PP) y más tarde el cloruro de polivinilo (PVC), tan utilizados en nuestros días.
El PMMA que nos ocupa principalmente aparece en 1928, al desarrollar el químico alemán W. Bauer un nuevo material plástico transparente capaz de sustituir al vidrio que además no se astillaba. Su verdadero desarrollo y producción masiva se da durante la Segunda Guerra Mundial.
Para terminar, decir que es un material rígido, con una excepcional capacidad de transmisión de la luz, incluso superior a la de los vidrios inorgánicos. De ahí su aplicación para la creación del metacrilato a medida, en la construcción, señalizaciones, en muebles, electrodomésticos, material de laboratorio y muchos de los objetos que te rodean en tu día a día.
